En honor a la memoria de Alfonso Rozas Ossa, recordemos que en cada amanecer hay una oportunidad para abrazar con gratitud la vida, infundir coraje en nuestros corazones y encontrar la paz en medio de la adversidad. Que su legado nos inspire a ser resilientes como el roble frente a la tormenta, a amar con la intensidad del océano y a sembrar semillas de esperanza dondequiera que vayamos. Que en cada suspiro encontremos fuerza, en cada sonrisa un destello de luz y en cada paso la certeza de que el amor siempre guiará nuestro camino.
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12 de mayo de 2020