En la luz de los recuerdos y la fortaleza del amor que Emiliano Paz Carvajal nos dejó, recordemos que en cada amanecer hay esperanza, en cada lágrima hay sanación, y en cada corazón herido hay lugar para la gratitud y la resiliencia. Que su legado de coraje y amor nos inspire a seguir adelante, abrazando la vida con valentía y compasión. Que en cada suspiro encontremos paz y en cada sonrisa, la eterna huella de su espíritu guíe nuestros pasos con humildad y bondad. ¡Que la luz de Emiliano siga brillando en nuestros corazones para siempre!
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6 de abril de 2024