En el sendero de la vida, que el amor de FERNANDO BRÄUTIGAM ECHEVARRÍA ilumine nuestros corazones con coraje para afrontar desafíos, resiliencia para superar obstáculos y gratitud por cada momento compartido. Que su memoria nos inspire a abrazar la paz interior, a valorar cada instante y a sembrar esperanza en nuestro camino. Su legado perdura en la bondad que sembró y en las huellas de luz que dejó en cada vida tocada por su amor incondicional. Que su espíritu nos guíe en nuestro caminar, recordándonos que el amor es eterno y que la esperanza siempre florece.
Publicado en el archivo
28 de marzo de 2024