En memoria de Francisco Said Demaría, que su legado de amor y coraje ilumine nuestros corazones con resiliencia. Que el recuerdo de su valentía nos inspire a abrazar la vida con gratitud y paz. Recordemos que cada amanecer trae consigo nuevas oportunidades para crecer y amar incondicionalmente. Mantengamos viva su llama de esperanza, recordando que en la oscuridad encontramos la fuerza para brillar con luz propia. Que su memoria sea un recordatorio constante de que el amor trasciende la eternidad y que la esperanza nunca se desvanece.
Publicado en el archivo
16 de marzo de 2020