En el legado de Gladys Loeser de Larraechea perdura un espíritu de amor que ilumina senderos de coraje y resiliencia. Que su memoria nos inspire a abrazar la gratitud por cada instante vital, cultivando la paz en nuestros corazones. En su honor, cultivemos la fuerza interior para enfrentar desafíos con esperanza inquebrantable, recordando que en la oscuridad también florece la luz del amor. Que su ejemplo nos impulse a perseverar con valentía, transformando cada lágrima en un puente hacia la plenitud. Que su recuerdo sea un faro de esperanza guiándonos hacia un mañana lleno de promesas.
Publicado en el archivo
5 de junio de 2019