Que la luz del amor que Helmut Jorge Neuweiler Tognarelli compartió durante su vida siga brillando en los corazones de quienes lo conocieron, inspirando coraje y resiliencia ante los desafíos. Que la gratitud por los momentos compartidos abrace sus almas, recordándoles que la paz interior es un regalo precioso que pueden cultivar en cada paso del camino. Que la esperanza sea su guía, recordándoles que aunque las sombras lleguen, siempre habrá un amanecer lleno de posibilidades. En cada suspiro, en cada latido, en cada recuerdo, que el amor sea su fuerza motriz.
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16 de julio de 2019