En memoria de Liliana Gudac de Silva, recordemos que en la variedad de emociones y experiencias de la vida, reside la belleza de nuestro ser. Que el amor, lleno de coraje y resiliencia, nos guíe por caminos de esperanza y paz. Agradezcamos cada instante como un regalo precioso, encontrando fuerza en nuestra gratitud. Que nuestros corazones sean faros de luz, iluminando el camino de otros con generosidad y compasión. En honor a Liliana, elevemos nuestros pensamientos y acciones con bondad, recordando que en cada desafío y en cada alegría, reside la promesa de un mañana radiante.
Publicado en el archivo
29 de agosto de 2019