Que el legado de Luis Patricio Jiménez Puerta nos inspire a abrazar la vida con amor incondicional, a enfrentar cada desafío con coraje y a levantarnos con resiliencia frente a la adversidad. Recordemos siempre practicar la gratitud por las pequeñas alegrías cotidianas y cultivar la paz interior que nos permita seguir adelante, confiando en que la esperanza es el faro que ilumina nuestro camino. Que su memoria nos recuerde la importancia de vivir con pasión y empatía, extendiendo nuestras manos para sostener y ser sostenidos en esta travesía llamada vida.
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17 de enero de 2020