Que la luz eterna de Luz María Schmidt Montes ilumine nuestros caminos, recordándonos que el amor y la gratitud son semillas de paz que florecen en el jardín del alma. Su coraje y resiliencia son un legado que nos invita a abrazar cada día con valentía y esperanza, transformando desafíos en oportunidades de crecimiento. Que su recuerdo sea un faro de esperanza en los momentos oscuros, recordándonos que el amor trasciende la distancia y que su luz sigue brillando en cada corazón que tocó. Que su memoria sea fuente de inspiración para seguir adelante con amor y esperanza.
Publicado en el archivo
2 de julio de 2019