En la memoria de Álvaro Rodríguez Torrealba, recordemos su amor inquebrantable, su coraje inagotable y su resiliencia inspiradora. Que cada paso que demos esté lleno de gratitud por la vida y de paz en nuestros corazones. Sigamos adelante con la certeza de que el amor perdura, la esperanza nos guía y las memorias queridas nos sostienen en los momentos difíciles. Que la luz de su recuerdo nos impulse a abrazar cada día con valentía y fe. En su honor, vivamos con pasión y nobleza, sabiendo que el amor nunca desaparece, solo se transforma.
Publicado en el archivo
29 de julio de 2019