En memoria de María Berta Carolina Aguayo Ávila, recordemos que el amor y la gratitud son semillas que ella sembró en nuestros corazones, inspirándonos a seguir con coraje y resiliencia. Que su paz interior y su valentía nos guíen en momentos de oscuridad, recordándonos que la esperanza es un faro que brilla incluso en las noches más largas. Que su legado de bondad perdure en nosotros, recordándonos que cada nuevo amanecer es una oportunidad para abrazar la vida con amor y agradecimiento. ¡Sigamos adelante con el corazón rebosante de ternura y optimismo!
Publicado en el archivo
6 de julio de 2019