En el legado de Marcos Martínez Morasca encontramos amor que trasciende, coraje que inspira, resiliencia que fortalece, gratitud que reconforta y paz que perdura. Que su recuerdo nos guíe a abrazar la vida con valentía, agradeciendo cada instante y encontrando serenidad en nuestro camino. Que sus enseñanzas nos impulsen a cultivar la esperanza en medio de la adversidad, recordándonos que el amor perdura en cada acto de bondad y compasión. En cada latido, en cada suspiro, encontremos consuelo y fuerza para seguir adelante, recordando que la luz de su memoria vive en nosotros.
Publicado en el archivo
7 de septiembre de 2019