En el legado de Mario Ramorino Meschi perdura un brillante ejemplo de amor inquebrantable, coraje eterno y resiliencia incansable. Que su memoria nos inspire a abrazar cada instante con gratitud, afrontando desafíos con valentía y confiando en la luz que guía nuestro camino. En cada corazón aflora la chispa de esperanza que nos impulsa a recorrer la vida con pasos firmes, sembrando semillas de paz y amor en cada sendero que cruzamos. Que su espíritu permanezca vivo, recordándonos que en cada amanecer hay una nueva oportunidad para florecer con bondad y fortaleza.
Publicado en el archivo
25 de noviembre de 2019