En memoria de Mirella Beatriz Espinoza Díaz, recordemos que el amor y la gratitud nos guían en momentos de oscuridad. Con coraje y resiliencia, abracemos el presente con esperanza, sabiendo que la paz interior es un regalo precioso que merecemos cultivar. A través de cada lágrima y sonrisa, su espíritu vive en el amor que compartió. Sigamos adelante con valentía, transformando la tristeza en luz y el dolor en compasión. Que su legado inspire nuestros corazones a encontrar fuerza en la vulnerabilidad y a abrazar la vida con gratitud y amor inquebrantable.
Publicado en el archivo
15 de septiembre de 2019