En el legado de Pedro Schlack Harnecker encontramos la fuerza del amor inquebrantable, la tenacidad del coraje frente a la adversidad y la resiliencia ante las pruebas de la vida. Que su memoria inspire la gratitud por cada instante vivido y la paz que solo el espíritu libre puede encontrar. Recordemos que en cada amanecer hay una nueva oportunidad para abrazar con valentía el futuro incierto, confiando en que incluso en la oscuridad más profunda, siempre habrá una luz de esperanza brillando en lo más profundo de nuestro ser. ¡Sigamos adelante con amor y esperanza!
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8 de febrero de 2024