En honor a la memoria de Ramón Roberto Doggenweiler Capdevila, recordemos que el amor y la gratitud son semillas que cultivamos en nuestro corazón. Con coraje y resiliencia, abrazamos la vida con esperanza, sabiendo que en cada nuevo amanecer encontramos motivos para seguir adelante. Que la paz interior nos guíe en tiempos de adversidad, transformando la oscuridad en luz y el dolor en fortaleza. Sigamos adelante con el legado de Ramón en nuestros corazones, recordando que cada instante es una oportunidad para amar, crecer y trascender.
Publicado en el archivo
2 de octubre de 2019