En memoria de Ricardo Antonio Paredes Rodríguez, recordemos que el amor y la gratitud son semillas que germinan en el corazón, cultivando coraje y resiliencia en tiempos de adversidad. Que la paz interior sea tu guía, y que la esperanza sea tu luz en el camino. Con cada amanecer, renace la oportunidad de abrazar la vida con valentía y compasión. Que los recuerdos compartidos sean fuente de consuelo y enseñanzas. Que su legado perdure en nuestra existencia, recordándonos que, incluso en la oscuridad, podemos encontrar destellos de luz para seguir adelante.
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10 de diciembre de 2019