En la luz eterna de sus recuerdos, celebremos el legado de Ronald Alfred Neilson Chaparro con gratitud y amor infinitos. Que su valentía inspire nuestra resiliencia, su paz guíe nuestro camino y su bondad florezca en nuestros corazones. Recordemos su sonrisa con cariño y su espíritu con admiración, encontrando consuelo en la certeza de que su luz seguirá brillando en cada acto de amor y bondad. Que en su memoria encontremos fuerzas para abrazar la vida con esperanza y generosidad, honrando su legado con cada paso que damos. ¡Siempre presente en nuestros corazones!
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9 de enero de 2020